Tiendas de discos en Bogotá: recuerdos y malas experiencias.

Durante los últimos días he sentido una extraña nostalgia por uno de mis planes favoritos desde mi adolescencia, que en palabras del clásico de Fey 'Subidón' es: ir a revolver las tiendas de discos.

Más o menos desde mis 13 años, ir a una tienda discos se convirtió en uno de esos planes especiales. Podía pasar un largo tiempo mirando CDs, comprando o simplemente antojándome de esos álbumes que quería tener en mi colección. 

Al crecer mi gusto por este plan se convirtió en algo más, ya no solo era ir a comprar discos, era algo "terapéutico", era un plan que me ayudaba a relajarme, a despejar mi mente y hacía que el tiempo pasara más rápido. Una de mis tiendas favoritas recién llegué a vivir a Bogotá fue Tower Records/Entertainment Store que se ubicaba en el centro comercial Andino. De verdad podía pasar horas allí, sección por sección, en especial aquellas de música pop, mirando cada uno de los CDs y en gran parte de las ocasiones salía con al menos 3 álbumes de algún artista en mis manos. Ya ha pasado un buen tiempo desde que cerró la tienda y que Prodiscos (y la evolución de su marca Entertainment Store) cerrara sus tiendas más importantes, entre esas también la de Unicentro. Siempre voy a recordar con cariño Prodiscos, porque gracias a ellos logré construir casi un 40% de mi colección actual de música, además que siempre me sentí bien entrando a sus tiendas y fueron muy pocos los inconvenientes que tuve con ellos.

Ahora la historia es diferente, son pocos los espacios para comprar música y la experiencia también ha cambiado. Hace unos días visité Tango Discos en el centro comercial AV. Chile con uno de mis mejores amigos, quería buscar un álbum y ver algunas promociones de películas, pero la experiencia fue desastrosa. Desde que entramos uno de sus empleados siguió cada uno de nuestros pasos, haciéndonos sentir como ladrones. En un espacio tan pequeño fue realmente incómodo sentir como esta persona veía cada uno de los elementos que tomábamos en nuestras manos, respirando casi sobre nuestro cuello, así que simplemente tomé 2 películas en DVD y pagué, no quería pasar un segundo más en esa tienda. Lo peor del caso, es que no es la primera vez que me pasa esto, es usual que los empleados de esta tienda te vigilen segundo a segundo, porque la misma historia me pasó meses atrás pero en la tienda ubicada en la calle 92, pero con menor intensidad, además he leído en redes sociales historias similares de otros usuarios. Ese mismo día en el centro comercial AV. Chile y después de ese mal momento en Tango Discos, decidí subir a la tienda La Música, la historia fue diferente. En La Música pude pasar más tiempo, revisar varias secciones y comparar precios que en algunos productos eran mucho más económicos que en Tangos Discos (compré el Blu-ray de Lego Movie en $19.000). 

Después de una experiencia mala y una muy normal, también llegué a una conclusión, las tiendas de discos de ahora ya no tienen la misma variedad de antes, ya no se encuentran tantas opciones de artistas o discografía, además en muchas ocasiones los precios son absurdamente elevados. 

Pero no todo es malo, hay otras opciones en Bogotá, Tornamesa es una buena opción, en especial si lo que les gustan son los vinilos, también en el centro de la ciudad podrán encontrar buenas opciones en almacenes ubicados sobre la calle 19 (teniendo mucho cuidado, ya saben por aquello de la inseguridad) o incluso en el mercado de las pulgas de San Alejo he logrado encontrar varias joyas para mi colección de Madonna, hablo un poco de esto en el siguiente video:



Hoy extraño mucho las tiendas de discos, en especial porque ya no es como antes que podías llevarte sorpresas y salir con el álbum que deseabas en tus manos, ya no hay lugares donde puedas caminar y relajarte mientras ves CDs, ya esa bonita experiencia se perdió. Aunque siempre está la opción digital o de comprar discos a través de Amazon, eBay o en el sitio web del atista, siempre voy a extrañar pasar horas revolviendo las tiendas de discos.