Leer: una nueva pasión que he descubierto

Aún me considero un mal lector, pero el primer paso fue el más importante: comenzar a leer. Llevo dos años (un poco más, un poco menos) que comencé en serio esta pasión por los libros aunque todavía no he encontrado ese espacio ideal para fortalecer mis hábitos de lectura.

Aunque este blog se enfoca en música, llevo algún tiempo escribiendo sobre algunos libros y como los acompaño con algunos álbumes de mi colección. No busco convertirme en un gran influenciador de libros, aunque me encanta compartir con todos mis opiniones y recomendaciones. No soy booktuber, pero siento una admiración infinita por esos jóvenes que siempre están invitando y motivando a otros a leer. ¿Bookstagrammer? Tal vez, me encanta compartir mis lecturas en Instagram, de nuevo, con la música que me acompaña en el momento.

Para mi leer se ha convertido en ese momento del día para escapar a otros mundo, pero al igual que la música los libros llegan en el momento indicado. Es como esa canción que escuchas y te identificas de inmediato porque resume tu situación actual, te lleva a momentos en la vida, porque alimenta la nostalgia o porque también te ayudan a escapar de la realidad. Eso me pasó en el comienzo de este viaje, llegaron libros que me llenaron de nostalgia, historias con las que me relacionada de ciertas manera, que me impresionaron, me hicieron pensar, me entretuvieron y me atraparon, esos fueron Carrie (Stephen King), The Perks of Being a Wallflower (Stephen Chbosky) y La Chica del Tren (Paula Hawkins). De ahí en adelante he elegido una serie de libros que van en diferentes géneros, buscando un estilo de lectura que me atrape.

Después de leer La Chica del Tren, pensé que leer Perdida sería una buena elección. No lo fue. Abandoné el libro antes de llegar al 20% de la historia. Pensé que por leer Stephen King y que me agradara leer varias de sus obras sería otra forma de motivarme a leer. Llegué a Revival, y aunque voy casi en el 50% del libro, decidí hacer una pausa porque la historia no me ha atrapado. A mis 31 años he sentido una conexión importante con libros enfocados a un público más joven. 13 Reasons Why y Yo, Simón, Homo Sapiens los leí rápido, me atraparon y logré esa conexión inmediata. Tal vez no sean los mejores libros del mundo, pero hay algo en esa nostalgia adolescente que logra que me identifique con situaciones. Ready Player One fue nostalgia al 100% y aún tengo una larga lista por leer que va desde el terror, el amor, el drama, ciencia ficción y otros que compré por curiosidad simplemente.

Tomar el ritmo de lectura ha sido lo más difícil. Encontrar un buen momento, tranquilo para disfrutar un libro. Al medio día el sueño me mata después de almuerzo, en la noche el cansancio no me deja, pero descubrí que al despertarme más temprano tengo un espacio de 20 y 30 minutos que puedo tomar para leer, sin interrupciones, en la comodidad de mi hogar y con la energía necesaria para prestar atención a lo que estoy leyendo. Este puede ser un tip para aquellos que están empezando.

Al final esta entrada no tiene una gran conclusión. No se trata de tips, de reseñas o la historia de mi vida con los libros, simplemente quise compartir un pequeño resumen de lo que ha sido este proceso de ser un mejor lector, de disfrutar y sacar más espacios para esto, y si ustedes tienen recomendaciones para mejorar mis hábitos de lectura o libros que me quieran recomendar, bienvenidos.