Ariana Grande - Sweetener

Me tomó algunos días poder escribir sobre Sweetener. No es un álbum que se disfrute desde el primer momento, es complicado acostumbrarse a algunos de los sonidos y estilos musicales. Algo que he escuchado y leído en redes sociales es que Sweetener es una prueba de los increíble que Dangerous Woman fue, pero eso no significa que este nuevo álbum no pueda brillar con sus méritos y éxitos propios.

Ariana Grande llegó a este álbum con un gran peso sobre sus hombros. Un álbum que contó con sencillos exitosos. Una tragedia. El cierre de una relación amorosa y el comienzo de otra. Sweetener es el reflejo de todos los cambios de su vida.

No Tears Left to Cry parecía indicarnos que el comienzo de esta nueva era sería algo lleno de energía, buena vibra, con una melodía pop y una letra positiva, pero justamente esta canción es la que se siente fuera del estilo general del álbum que se centró en un sonido más urbano, un estilo más R&B y no tanto en el electro-pop que parecía prometer el primer single.

El álbum para mi se centra en 3 momentos y cada uno de esos va guiado por los productores principales. Por un lado Pharrell Williams le da el toque urbano y que buscó explorar diferentes sonidos que llevaran a Grande un nivel diferente. En parte son sus canciones las que parecen esforzarse demasiado por sonar experimentales, maduras y diferentes a lo que se suele escuchar en radio o en artistas pop. The Light Is Coming es un ejemplo, es una buena canción, con una buena letra, pero que terminó en gran parte arruinada por intentar ir al extremo de marcar un diferencial.

Un segundo momento del álbum es la parte pop que viene de la mano de Ilya y Max Martin. En esta parte aunque se juega un poco más a lo seguro, también es la que más se logra disfrutar. God Is A Woman es buena jugada para mostrar el crecimiento de Grande como artista y mostrar un lado más maduro, pero es Breathin la que se roba el show y es tal vez la que más sobresale en todo el álbum siendo esta la fan favorite (es como el Into You en DW).

El tercer momento es más relajado, con un estilo un poco más lento y que va de la mano principalmente por Tommy Brown que buscó en sus canciones darle la oportunidad a Grande de seguir jugando con su voz, en especial en Goodnight n Go que le da al álbum el punto más relajante e interesante a nivel vocal.

Sweetener no es una obra maestra musical, pero si se puede considerar como un álbum de transición y de crecimiento. Es un álbum que crece en el oyente poco a poco (por experiencia propia es un álbum que se disfruta a todo volumen cuando vas en el carro), que mantendrá contento a los fans, tiene las canciones necesarias para ser éxitos en radio y poder llegar a un público general, y el final es un álbum que la sigue posicionando como una de las fuerzas pop más importantes de esta generación.